Empresas deben estar preparadas para atenderlos de forma oportuna y así evitar perderlos
Los clientes demandan mayor rapidez en la atención a sus pedidos, y por ello, las empresas deben estar preparadas para satisfacer la demanda de manera oportuna, para evitar perderlos más aún en un escenario de incremento de costos.
En ese sentido, el aumento en los gastos logísticos, la inflación y la pandemia, son los retos que deben enfrentar en un escenario con menor consumo de parte de los clientes, y para ello, deben utilizar las herramientas de la innovación y diferenciación en el servicio.
“Las empresas no pueden permitirse perder clientes. Hoy la competencia está ardua, por ende, la diferenciación pasa por experiencias de compra presencial o digital, impecables”, señala, el gerente país de STG en Perú, Ulrich Reiser.
Los cambios en el comercio, especialmente en las tiendas de retail, son más evidentes.
El cese de las restricciones por la pandemia, ha impulsado el regreso de las tiendas físicas y una baja en las ventas online, obligando a las compañías a replantear sus estrategias de negocio e integrar ambos canales de venta con mayor inversión en tecnologías.
De acuerdo a un estudio de la empresa de investigación de mercados Ipsos Perú, los consumidores están más cautelosos con sus compras, pues han pasado de ser consumidores de pandemia a ser consumidores en inflación, continuarán con los hábitos de compra en lugares económicos (62%) y dejarán de adquirir algunos productos y marcas.
En ese escenario, los peruanos proyectan gastar más en rubros esenciales y básicos.
En ese sentido, las compañías de retail siguen apostando por inversiones que les permitan retener y atraer clientes.
Con un consumidor empoderado, tecnológico y ávido de rapidez, las compañías deben apreciar una alta inversión en soluciones digitales para contar con inventarios exactos, ayudando a la distribución más ágil de los productos.
“Un inventario inteligente y en línea se traduce en rapidez, agilidad y trazabilidad. Las entregas ya no pueden tardar días, se deben acelerar para cumplirlas en horas. Pero eso es solo una parte del ciclo de compra. Los clientes están cada vez más críticos y quieren procesos sin fricciones”, señala Reiser.
Anteriormente, los negocios retail contaban con inventarios de hasta tres meses. Sin embargo, la tendencia de hoy es que pueda rotar rápidamente y de este modo enfrentar la baja de consumo que no solo está en tienda, sino igualmente en el comercio electrónico.