La automatización llegó para quedarse y tiene el potencial de transformar la forma en que trabajamos en Latinoamérica. Por Omar Alejandro Aquino Bolaños, Sales Director para Latinoamérica de MiR.
Las tecnologías disruptivas, como la robótica colaborativa, están haciendo grandes avances en muchas industrias, impulsadas en parte por las tendencias de transformación digital y automatización. El proceso de digitalización ha creado nuevas áreas donde la automatización mejora la eficiencia y la productividad general, así como también apoya a los empleados existentes para responder a las crecientes demandas de los clientes al tiempo que mantiene una oferta de calidad.
El auge de los robots
Los robots no deben verse como el enemigo o una amenaza. Las referencias de la cultura pop y las historias de terror de la vida real sobre cómo la robótica y la automatización han hecho daño a la humanidad afectarán la confianza en una implementación exitosa. En cambio, tanto los empleados como los líderes empresariales deberían verlo como una oportunidad para cambiar la forma en que se hacen las cosas y pensar críticamente sobre dónde los empleados pueden tener el mayor impacto.
Ciertas tareas, que históricamente se han completado manualmente (por ejemplo, ensamblaje o transporte de materiales con movimientos altamente repetitivos), pueden ser entregadas a un robot. Al asignar estos roles a las máquinas, los empleados pueden enfocarse en tareas que agregan más valor, y habrá un cambio hacia la necesidad de habilidades más suaves por parte de los empleados.
Las máquinas completarán una tarea que está programada para hacer de manera repetida y eficiente, y las salidas se ampliarán en tiempos de alta demanda. Esto crea una fuerza de trabajo automatizada ágil que nunca se enferma ni se toma vacaciones, por lo que puedes mantener una producción constante de alto nivel.
Reafirmando la necesidad de inteligencia emocional y pensamiento crítico
Sin embargo, las máquinas carecen de los matices y el pensamiento creativo que deben aplicarse a la resolución de problemas. Por ejemplo, los robots actualmente solo pueden hacer lo que están programados para hacer. Aquí es donde la fuerza laboral humana puede dedicar su tiempo a revolucionar la oferta provista por la empresa, aplicando un pensamiento creativo, analítico y crítico a los problemas o barreras existentes. Esto presenta oportunidades para aplicar la inteligencia emocional, la respuesta instintiva y el pensamiento crítico de los que solo los humanos son capaces, que en la actualidad es imposible de replicar con robots.
El uso de máquinas para abordar tareas que consumen tiempo y esfuerzo de los empleados puede tener un efecto inesperado al revelar brechas de habilidades dentro de las organizaciones. Esto es importante y obliga a las empresas a mirar estratégicamente dónde se encuentran estas brechas y dónde las inversiones en capacitación y educación generarían la mayor recompensa. Esto tiene un efecto directo en la mejora de la vida laboral, ya que los empleados pueden mejorar sus habilidades y desarrollarse aún más en áreas que son más satisfactorias y beneficiosas para el negocio en general.
¿Qué pasa con la amenaza de pérdida de empleo?
Sin embargo, no todos están encantados con la posibilidad de trabajar junto a una fuerza laboral digital. El miedo a la competencia desleal y al reemplazo de empleos resuena con aquellos preocupados por su propia seguridad laboral. También existe una resistencia potencial entre los miembros del equipo para obtener las habilidades relevantes para administrar y usar los robots de manera efectiva. Esto puede deberse a la falta de comprensión y contexto en torno a cómo la implementación robótica beneficiará la productividad del equipo y puede verse como otra tarea para agregar a una larga lista de tareas pendientes. Antes de presentar el robot, es importante aclarar los beneficios para lograr la aceptación de los empleados. Esto requiere un enfoque cuidadoso y considerado de la gerencia que explique cómo funcionará la fuerza laboral digital y resalte el valor que los empleados continuarán aportando a la empresa.
¿Cuál es la mejor práctica?
Una vez que los líderes empresariales han identificado las áreas en su organización donde la automatización y la robótica podrían tener el mayor impacto, hay factores que deben considerarse para garantizar una integración exitosa y la adopción de los empleados:
- Soporte seguro nivel-C – Un programa exitoso primero necesita la aceptación de la parte superior de la organización. El nombramiento de un jefe de automatización de procesos robóticos puede resultar valioso en términos de encabezar el lanzamiento y la transición cultural que se necesita para garantizar el éxito.
- Modela y optimiza tus procesos: antes de que se pueda implementar un robot, debes preguntarte: ¿es necesario optimizar y modelar este proceso para garantizar que el robot ofrezca los mejores resultados de manera eficiente? Si el proceso original no es eficiente, esto también afectará la implementación del robot y los procesos posteriores. Además, debe asegurarte de que los procesos automatizados sean sólidos y sostenibles cuando cambien las aplicaciones o procesos subyacentes.
- No olvides el elemento humano: es probable que el cambio se enfrente con temor o incertidumbre, y ganarse la confianza de tus empleados es crucial. Considera identificar empleados que ya hayan tenido experiencias previas con robots en toda tu organización que comprendan los beneficios que aportan, así como la dinámica en los equipos. Esto puede ayudar a calmar los temores y suavizar la transición.
- La educación es clave: desde el principio, se debe priorizar la educación. Los empleados deben saber cómo trabajar con la fuerza de trabajo robótica y digital, dónde encajan sus habilidades en el modelo de negocio en el futuro y los pasos con los que deben intervenir si un proceso automatizado hace una excepción.
Implementando aplicaciones robóticas desde cero
Un gran proveedor de robots, como MiR, puede reconocer cómo la automatización robótica podría ayudar a mejorar la eficiencia y los servicios que ofreces, al tiempo que reduce los costos. Se necesita apoyo para crear un equipo capacitado para construir procesos automatizados, una estructura definida y ayudar con la educación en toda la organización. Además de esto, los elementos culturales tienen que ser manejados con sensibilidad.
El primer paso es elegir la herramienta correcta que sea apropiada para los requisitos de tu empresa y, al mismo tiempo, desarrollar habilidades entre los miembros clave del personal. Esto implica llevar a cabo una variedad de talleres para generar compromiso y entusiasmo en torno a la iniciativa, que es fundamental para garantizar la adopción de los empleados. Cuando la prueba de concepto sea exitosa, seguirá rápidamente una fase piloto que incluya la automatización de un proceso crítico para el negocio, involucramiento completo con el equipo de TI y seguridad y la construcción de un modelo de entrega seguro y escalable que permita un crecimiento sostenido y rápido.
Esto se complementa con el análisis de la infraestructura existente que informa las recomendaciones de los enfoques de mejores prácticas para el diseño y construcción de una infraestructura automatizada. El proceso piloto se analiza en función de criterios definidos para garantizar un aumento de las tasas de eficiencia, al tiempo que se reducen los costos.
El proceso piloto, cuando se implementa en producción, proporciona beneficios inmediatos para el negocio. La solución robótica puede reducir los tiempos de ejecución de extremo a extremo en un 200% en promedio. Como resultado, un equipo que supera su capacidad puedo dedicar más tiempo a brindar un servicio superior a los clientes sin tener que contratar personal adicional.
Entre estos ahorros de eficiencia y costos, la construcción de un centro de excelencia para automatización asegura que las mejores prácticas se estandarizarán e implementarán en toda la organización en cada etapa de la entrega. Además, también permite anticipar y mitigar problemas relacionados con la tecnología y la cultura, lo que significa que habrá menos interrupciones en los flujos de trabajo.
Humanos trabajando con, no contra máquinas
Es importante establecer objetivos claros y una estrategia que ponga la calidad en el centro del programa al principio, al tiempo que considera las implicaciones humanas y el cambio resultante en la fuerza laboral. Esto asegurará la mejor oportunidad de éxito desde el desarrollo del concepto hasta la implementación en toda la organización.
La automatización robótica tiene el potencial de alterar la forma en que enfocamos el trabajo y definir las habilidades que los humanos necesitan para impulsar a las organizaciones en un mercado fluctuante y competitivo. El lugar de trabajo cambiará inevitablemente a medida que las máquinas se integren en las estructuras del equipo, pero esto debería verse como una oportunidad más que como una amenaza.
Corresponde a los líderes empresariales tomar decisiones empresariales y de TI con visión de futuro para abordar esto de tal manera que infunda confianza desde el principio y se centre en ofrecer un resultado de calidad, no solo en términos de los beneficios comerciales tangibles, sino también en mejorar la satisfacción laboral de los empleados.