Por: Claudia Camarasa, Gerente de Cuentas de Territorio Andino Sur, Zebra Technologies
Las micro, pequeñas y medianas empresas son esenciales para la economía chilena.
Según el Registro de Empresas y Sociedades (RES) del Ministerio de Economía, en el país existen más de 900 mil empresas, de las cuales 220 mil son pymes y unas 680 mil, microempresas. Una empresa es categorizada pequeña en el país si sus ventas anuales están entre 2.400 y 25 mil UF, mientras que son catalogadas como medianas, si venden entre 25 mil UF y 100 mil UF.
A pesar de su tamaño, las PyMES pueden estar a la vanguardia en inteligencia y automatización tanto o más que las grandes corporaciones. Un estudio de Inteligencia Empresarial de Zebra Technologies del 2019 mostró el escenario de inversión de tecnologías en empresas alrededor del mundo y uno de los grandes hallazgos fue que las PyMES de todo el mundo obtuvieron puntajes más altos que las grandes empresas: un promedio de 64.5% versus 61%, respectivamente. Entre las PyMES, el 37% puede considerarse “inteligente”, mientras que la cifra general, que incluye empresas de todos los tamaños, apunta al 17%.
La importancia de la adopción de tecnología por parte de las empresas de todos los tamaños, no sólo las más pequeñas ni las más grandes, radica en que la inversión tiene como resultado una mayor productividad para los empleados, reduce el tiempo de capacitación del equipo, reduce costos por errores humanos y da visibilidad total de la información de toda la operación en tiempo real. En particular, este último tiene un papel fundamental en ayudar a los tomadores de decisiones a hacerlo de manera más precisa basándose en hechos. Además, según el estudio de Zebra, el 50% de las empresas comparten la información recopilada por sus sistemas de IoT en tiempo real con los empleados.
Para una PyME, lograr tales ventajas competitivas puede ser la diferencia entre prosperar o cerrar puertas. Un estudio reciente de Accenture muestra la relación entre la implementación de tecnología y el desempeño financiero de las empresas,indicando que las compañías que invirtieron menos en innovación perdieron un 15% de ingresos anuales y, para 2023, pueden comprometer alrededor del 46% de sus ganancias potenciales.
De acuerdo a cifras del Centro de Economía Digital de la Cámara de Comercio de Santiago y al Índice de Transformación Digital CCS-PMG, las PyMES chilenas se encuentran a un tercio del camino de la transformación digital y más de 10 puntos por debajo de las grandes empresas. Existiría un retraso principalmente en liderazgo digital y visión, así como también en estrategia digital. De acuerdo a este índice el 31% de las PyMES chilenas son clasificadas como analógicas, y el 35% como principiantes digitales. Mientras las grandes empresas se ubican entre intermedios y avanzados digitales.
Estamos hablando de soluciones como sensores, computación en la nube e Internet de las cosas (IoT). Parece complicado, pero no lo es. Por ejemplo en un taller mecánico, cada etapa que avance la reparación puede ser controlada : qué mecánico está a cargo de la etapa, que se realizó, falta algun repuesto, tiempo en cada etapa y todo esto el cliente lo puede seguir en línea
Estos sensores están conectados en una red, gracias al IoT, y permiten el cruce de los datos recopilados, lo que puede generar información valiosa, como la cantidad de repuestos que necesita esta empresa para satisfacer la demanda a fin de año. Con el tiempo, este monitoreo se convierte en una gran cantidad de información, que se almacena en la nube y se puede ver a través de dispositivos móviles corporativos como tabletas y teléfonos inteligentes. Los dispositivos con una interfaz de Android están disponibles en el mercado, amigables para los empleados que ya están acostumbrados a sus teléfonos celulares.
Sin embargo, hacer que su pequeña empresa sea más inteligente no tiene que ser costoso ni complejo. Además, los dispositivos simples, livianos y de menor costo, como los mencionados anteriormente, ya garantizan ganancias de eficiencia significativas y son ideales para compañías más pequeñas. La tecnología de nube, que se ha consolidado en los últimos años y de la que ya hemos hablado, también es responsable de hacer que las tecnologías que hacen que las operaciones sean más inteligentes sean más accesibles.
Actualmente, el mayor desafío no es pagar por las nuevas tecnologías, sino elegir la que traerá más beneficios a su operación. Por lo tanto, los líderes de pequeñas y medianas empresas deberían buscar soluciones adaptadas a sus demandas específicas, ya sea que estén relacionadas con el control de producción, el inventario o el servicio al cliente.
Es importante ser cauteloso con la elección de las tecnologías que se implementarán y con la inversión aplicada porque este es un paso importante para cualquier empresa, pero también tener en cuenta que hay opciones para cada tamaño de operación. Buscar proveedores confiables que hayan trabajado con grandes compañías al momento de traer inteligencia a la empresa, asegurando que la implementación de nuevas soluciones siga el mejor camino posible.
Para mayor información sobre las soluciones de eficiencia para PyMES, consulte el sitio web de STG.